miércoles, mayo 30, 2007

¿Feminizar: humanizar?

El viernes 25 de mayo, Josep Maria Espinàs dedicó su columna de El Periódico a la expresión "feminizar la ciudad", utilizada en la campaña de las muicipales. Llevamos ya mucho tiempo sufriendo el demagógico uso de expresiones equivalentes que no significan nada preciso, pero contribuyen a consolidar la visión peyorativa de la masculinidad en oposición a una seáfica feminidad que nos ha de redimir de todos nuestros males. Con acierto, Espinàs insiste en abandonar esta polarización dicotómica y apuesta por superar los estereotipos sexuales (o de "género", Sr. Espinàs) utilizando la palabra "humanizar", para expresar la disposición a ocuparse de todos los seres humanos, especialmente, de aquellos que más sufren, una actitud que no es específica de ningún genero y los trasciende a todos.


Femenino, masculino, humanitario
JOSEP MARIA Espinàs

Leo que Imma Mayol, candidata a la alcaldía de Barcelona, dice en su programa que hay que "feminizar la ciudad". Los políticos hallan a veces palabras o expresiones innovadoras y que hacen marca.Hay quien habla de "política de inclusión". El éxito de la palabra sostenible es innegable. Ya se aplica de una manera tan amplia que acabaremos hablando de la "siesta sostenible". "Feminizar la ciudad" es otro descubrimiento lingüístico, pero debo decir con todo el respeto que no parece una propuesta razonable, y me temo que es políticamente incorrecta, aunque sea sugestiva.Dice la candidata que feminizar la ciudad significa ofrecer más servicios de proximidad. (Dicho sea de paso, "servicios de proximidad" es otra novedad léxica que, pese a la falta de precisión de su contenido, es bien recibida porque suena a modernidad). Y habla de guarderías.Tengo que decir que la expresión "feminizar la ciudad" no me gusta, aunque admito la buena intención. Una ciudad feminizada me parece tan incomprensible como proponer que la ciudad debe masculinizarse, o infantilizarse, o adultizarse. Para ser francos, lo que me parece que hay que lograr --más allá de sexos y edades-- es humanizar la ciudad. La humanidad no es una cuestión de sexo, sino de género, y el diccionario define claramente qué es la humanidad: el género humano. Nos incluye a todos, hombres y mujeres, niños y viejos.Lo que sí debe ser la ciudad es humanitaria. Esto es, debe estar interesada por el género humano. Sin discriminaciones y, también, sin confusiones. Pienso que cuando Mayol dice que hay que "feminizar la ciudad" utiliza una expresión poco afortunada para decir que hay que velar por el papel que en ella tiene la mujer. Sin duda. Y también está diciendo, implícitamente, que los hombres y las mujeres no son iguales, en contra de la afirmación que tanto se ha repetido en un tono dogmático. Y con tan poca justificación, porque los dogmas, precisamente, no están sometidos a ninguna prueba científica.Ahora, por fortuna, ya hay expertos que indican unas diferencias básicas entre hombres y mujeres, y es a partir de conocer las diferencias que puede llegarse al necesario respeto. Hay unas cualidades femeninas ideales para unas determinadas funciones. Al igual que las hay masculinas, adecuadas a otras. Y las hay que son compartidas. No tenemos que feminizar ni masculinizar nada. Hombres y mujeres tenemos que humanizar la sociedad.

1 comentario:

joan albert dijo...

Totalmente de acuerdo con este artículo, aunque le añadiría algo, antes de humanizar una ciudad, se debería humanizar a la humanidad.
Buen artículo!