domingo, febrero 24, 2008

Hombres dependientes y llorones. Manos de Topo.

En el último post hablaba de conjuntos como Facto Delafé que exploran las nuevas masculinidades. Otros sin embargo, optan por realizar su particular crónica de la crisis del varón contemporáneo. Es el caso del grupo Manos de Topo que ironiza en sus canciones sobre chicos sensibles y románticos a los que ha hundido la frialdad, la dureza y el menosprecio de las chicas que adoran. Se trata de perdedores que se relamen la herida entre el llanto, la impotencia y el resentimiento, implorando con insoportable voz desvalida un poco de atención. Son seres patéticos, incapaces de modelarse sin el concurso de una mujer que les reconozca y tutele emocionalmente. Estos pobres diablos son los últimos epígonos de aquellos caballeros que se declaraban esclavizados por sus damas, o de aquellos héroes románticos más recientes, que se entregaban a la fatalidad de su pasión. Pero, hay una diferencia: estos muchachos atormentados de hoy han perdido todo sentido de la dignidad y se deshacen en lloriqueos quejumbrosos, autocompasivos y cobardes. En lugar de reempoderarse, mendigan compasión, incapaces de hacerse cargo de sus vidas. De ahí a la autoagresión y la violencia hay sólo un paso: creen tener razones para liberar su lado oscuro y resarcirse de su insoportable frustración. Manos de Topo habla de todo ello y mucho más con un caústico sentido del humor.






4 comentarios:

Kei dijo...

De verdad quiero saber cuál es la dignidad de la que hablas, lo digo en serio, necesito saberlo.
Yo soy uno de esos hombres, más o menos, púes soy dependiente y llorón, pero estoy lejos de ser un mamón y de solo lloriquear, y lo digo porque yo realmente intento hacer algo por mejorar. Yo no lamo mis heridas, les hecho limón y con el dolor sigo adelante; pero ahora estoy con una chica fría y menospreciativa, y por alguna razón soy muy dependiente de ella, no se cómo llegue a ser así. Lo que sé es que ahora no quiero ser más así, ya que cada vez que hay un problema ella sigue como si nada y yo me derrumbo emocionalmente. Necesito saber a qué se refieren con dignidad.

Enrique Jimeno Fernández dijo...

Creo que el primer paso hacia una conducta digna ya lo has dado al intentar tomar distancia de tu proceder e intentar ser objetivo al evaluar la situación. Me resulta dificil dar consejos sin más detalles, pero a juzgar por tus palabras tú ya has descubierto que esa relación no es saludable. ¿Comportarse dignamente no sería asumirlo?

Anónimo dijo...

Hola, estuve casada 16 años y mi -ex fue un dependiente de mí totalmente. Al final me dejó por otra. Ahora de nuevo estoy en pareja y me encuentro en la misma situación pero ahora ya no quiero continuar asi. Ya he comentado con él que no soy su salvadora, ni su madre y que aprenda a tomar decisiones. Esto lo he hablado muchas veces y veo que no hay resultado pues siempre de alguna forma vuelvo a salvar. me está ahogando está situación. Que puedo hacer.

Enrique Jimeno Fernández dijo...

Es difícil dar una respuesta a partir sólo de lo que me cuentas. Lo que resulta sorprende es tu reincidencia. Quizás deberías ahondar en esta cuestión.